Los dueños o propietarios de una casa saben muy poco sobre los tejados o materiales…
Al considerar solicitar algún préstamo, resulta esencial asegurarse de conocer antes las diversas ventajas y desventajas que se presentan al decidir contratar esta clase de producto, de manera que sea posible escoger aquella alternativa que resulte más apropiada según cada caso, evitando así terminar en alguna mala situación económica.
Pros y contras de contratar un prestamista particular
Existen ocasiones donde las personas requieren de dinero con el propósito de adquirir bienes y/o servicios , y al no contar con suficiente dinero, el pedir un préstamo se presenta como una alternativa a considerar.
Ahora bien, a cambio de obtener el préstamo, el cliente estará aceptando el compromiso u obligación de devolver el total del dinero recibido, junto a cierto porcentaje de intereses previamente establecido, a través de cuotas o pagos periódicos que deben realizarse dentro de un determinado periodo de tiempo.
¿Qué es un prestamista particular?
De forma resumida, se puede decir que los prestamistas particulares consisten en un tipo de entidad financiera o una persona física, la cual se encarga de prestar dinero a los prestatarios.
La cantidad recibida debe ser devuelta por lo general, junto al pago de intereses que pueden variar dependiendo no solo del plazo determinado para la devolución, sino también del monto.
¿Qué ventajas y desventajas se presentan el acudir a prestamistas particulares?
Como cualquier otra cosa, el decidir recurrir a un prestamista particular no solo presenta varias ventajas, sino también desventajas, las cuales resulta conveniente conocer antes de adquirir cualquier tipo de producto que puedan ofrecer.
Por eso, a continuación estaremos señalando tanto los beneficios como las desventajas que puede tener esta clase de operaciones:
Ventajas
- Los prestamistas particulares pueden proporcionar a los prestatarios numerosas ventajas que se distinguen por ser bastante diversas. Sin embargo, entre las más destacadas resulta preciso hablar de las mencionadas a continuación:
- Acudir a un prestamista particular supone tener que cumplir con condiciones o requisitos menos exigentes que al recurrir a un banco, donde lo más común suele ser que soliciten requisitos considerablemente más exigentes. Lo cual incluso representa un serio inconveniente de financiación para una gran cantidad de personas.
- Es posible tener acceso a determinadas cantidades de dinero de forma sencilla y rápida al desear o necesitar adquirir un vehículo, pagar deudas, etc.
- Permite tener la oportunidad de invertir directamente en formación con el fin de conseguir un impulso mayor dentro de nuestra carrera profesional; por ejemplo, al momento de realizar algún máster, curso especializado y/o desear aprender otro idioma.
- Por lo general, no es necesario comprometer algún tipo de bienes específicos, por lo que supone un proceso de tramitación mucho más expedito en comparación con un préstamo hipotecario.
- Los prestatarios tienen la oportunidad de acudir con el prestamista el plazo de devolución, de manera que el mismo se ajuste a su situación económica; aunque mientras mayor sea el plazo, mayor será el interés que se debe pagar.
Desventajas
- Por su parte, cuando de las desventajas de acudir a esta clase de financiación se trata, es posible señalar entonces las siguientes:
- Los prestatarios tienen que devolver no solo la cantidad de dinero que les ha sido otorgada, sino también algunos intereses a lo largo de un plazo previamente establecido. En caso de no hacerlo, tendrán que responder a través de sus bienes, presentes y futuros.
- Al solicitar una mayor cantidad de la que realmente se requiero, o de la que se puede pagar, existe el riesgo de caer dentro de una mala situación financiera debido a un alto nivel de endeudamiento. Es por esta razón que lo más recomendable al momento de pedir un crédito a un prestamista particular, consiste en no solicitar más de lo que se requiere para llevar a cabo el objetivo que se tiene en mente.
- La tasa de interés suele ser más elevada en comparación con los préstamos hipotecarios, sin embargo, normalmente no es demasiado alta. En cualquier caso, lo mejor suele ser comparar diversas opciones para encontrar la más adecuada según la situación económica de cada prestatario y así evitar una mala decisión.
- Considerando la variedad de alternativas disponibles hoy en día, resulta preciso comparar entre las distintas opciones y prestamistas disponibles; lo cual podrían llegar a complicar su elección y llevar a los prestatarios a tomar una decisión no acertada.
- Esta clase de créditos suelen contar tanto con comisión de apertura como de cancelación, al igual que otras comisiones las cuales podrían señalarse dentro del contrato e incrementar la cantidad que debe ser devuelta.
¿De qué manera elegir al mejor prestamista?
Para evitar malas decisiones al contratar un prestamista particular, conviene tener en cuenta ciertos aspectos, como los señalados a continuación:
Tipo de interés
- Evidentemente, se debe elegir al prestamista que ofrezca el menor interés; pero siempre es conveniente considerar las opciones para asegurarse que el prestamista sea de confianza.
Devolución del préstamo
- Lo más recomendable suele ser elegir un prestamista que no exija un pago adicional al devolver el préstamo de forma anticipada.
Condiciones del prestamista
- Es importante asegurarse de leer cuidadosamente y con detenimiento todas las cláusulas y condiciones que aparecen en el contrato antes de firmar.